El sábado 1 de noviembre fue también una jornada de júbilo musical para nuestra comunidad rociera. En el marco de la clausura de la Misión Jubilar «Un Camino de Esperanza», los tres coros de la Hermandad —el oficial, el joven y el infantil— se unieron para ofrecer una actuación memorable en la majestuosa celebración de la Solemne Misa Pontifical en la Plaza de San Pedro.
Antes de dar comienzo la Misa, mientras el Simpecado era trasladado desde la iglesia hasta el altar situado en la Plaza de San Pedro, se vivieron momentos de profunda emoción con las plegarias interpretadas por el Grupo Joven y el Coro Oficial de nuestra Hermandad.
Sus voces, llenas de sentimiento y devoción, sirvieron de preludio perfecto al inicio de la celebración, envolviendo el ambiente en un clima de oración y recogimiento.

Nuestro coro abrió la celebración con el canto de entrada, una pieza de profundo sentimiento rociero que resonó bajo el cielo de Huelva. El Coro Joven aportó frescura y emoción en los momentos de canto conjunto, mientras que el Coro Infantil participó en varios temas en la que fue su puesta de largo, destacando especialmente en la interpretación del Himno de la Coronación de la Virgen del Rocío, que puso la guinda emotiva al acto.
Al terminar la misa y el traslado del Simpecado hacia nuestra casa hermandad, los coros continuaron la fiesta en la plaza Paco Toronjo, donde se organizó una convivencia que se prolongó hasta bien entrada la noche. Numerosos grupos, hermanos y devotos se reunieron para cantar, compartir y revivir juntos los mejores sones de nuestra tradición.

Fue una jornada vibrante, plagada de música, fraternidad y devoción. Gracias a todas las voces que, una vez más, hicieron del Coro de la Hermandad del Rocío de Huelva un embajador de fe, sentimiento y comunidad rociera.
